Jue. Nov 21st, 2024

Genís Matabosch, el alma del Festival Internacional del Circ Elefant d’Or de Girona, hace el más difícil todavía. Este año, presentará 26 números inéditos, nunca vistos en Europa occidental, con 70 artistas llegados de 20 países.

Como novedad de la undécima edición, los dos jurados están formados solo por mujeres profesionales del mundo del circo. «La mujer siempre ha formado parte del mundo del circo desde su nacimiento», afirma Matabosch.

El festival empieza mañana con dos espectáculos que se reparten los 26 números, el show azul y el show rojo, que se podrán ver alternativamente hasta el lunes. El martes 7 de marzo se celebrará la gala final, en la que se otorgará el Elefant d’Or, basado en el diseño de Dalí. Todas las disciplinas compiten por el mismo premio.

La carpa instalada en el Camp de Mart de la Devesa, sin pilares, tiene capacidad para 2.300 personas y se esperan a 30.000 espectadores. “Los artistas no cobran por actuar, pero tienen todos los gastos de transporte y manutención cubiertos desde que salen de su casa, en China o Argentina,” explica Matabosch. “La razón es que el festival es un gran escaparate para abrir sus carreras artísticas”.

Trescientas personas trabajan en toda la infraestructura que supone una movida como esta, para que, aparte del público, que tanto se acerca desde Barcelona como el sur de Francia, los exhibidores de todo el mundo puedan presenciar los 26 números que se han seleccionado a lo largo del año.

Matabosch, que también es el jefe de pista, se lamenta de que en Rusia y en China ya no se celebren festivales, pero sí continúan el de París y el de Montecarlo, equiparables al Elefant d’Or de Girona.

Entre los 26 números destacan el estreno mundial del volteo acrobático de los israelíes Vertex; los círculos de la troupe acrobática china de Dezhou City, que han podido viajar a pesar de las limitaciones pandémicas; las cintas aéreas con la fuerza del pelo y los dientes del kazajo Duo Disar; o los trapecios volantes de la estirpe mexicana The Flying Caballero, que ejecutarán el cuádruple salto mortal.

También se podrá ver el faquirismo aéreo de la australiana Flying Lucky Hell, que se traga un sable con leds con el circo a oscuras, y el ilusionismo del ruso Duo Wizzards, que quieren batir el récord Guinness con más de 17 cambios de vestuario en 30 segundos. Más difícil todavía.